Shakespeare dijo: “Asume una virtud si no la tienes”. Y es que si queremos mejorar en cierto sentido, tendremos que proceder como si ese rasgo particular fuera ya una de nuestras características sobresalientes. De esta manera, si asumimos y afirmamos abiertamente que contamos con esa virtud que queremos desarrollar, lo conseguiremos. Práctica que también funcionará si queremos que alguien desarrolle una virtud. Si le damos una reputación a la que hacer honor, el otro hará esfuerzos prodigiosos antes de decepcionarnos.
1 comentarios:
Para pensar............
Publicar un comentario