Antes de rendirte, intenta

Hoy vuelvo a centrarme en la obra del dramaturgo y poeta inglés, William Shakespeare y en la de un tocayo suyo, William Arthur Ward, escritor estadounidense. Aunque uno vivió en el siglo XVI y el otro en el siglo XX, los dos poseen dos escritos muy similares.

Siempre me siento feliz, ¿sabes por qué? Porque no espero nada de nadie, esperar siempre duele. Los problemas no son eternos, siempre tienen solución, lo único que no se resuelve es la muerte. La vida es corta, por éso ámala, sé feliz y siempre sonríe, sólo vive intensamente para ti y recuerda: antes de hablar, escucha. Antes de criticar, examínate. Antes de escribir, piensa. Antes de herir, siente. Antes de rendirte, intenta. Antes de morir, vive”. William Shakespeare.

“Antes de hablar, escucha. Antes de escribir, piensa. Antes de gastar, gana. Antes de invertir, investiga. Antes de criticar, espera. Antes de rendirte, intenta. Antes de retirarte, ahorra”. Willian A. Ward.

Mucha gente renuncia a sus objetivos e ilusiones antes de intentarlo. Es la vía más fácil y rápida: conformarse con lo que se tiene sin aspirar a más. Por cobardía, por miedo a equivocarse y por pereza, porque no decirlo. Se necesita esfuerzo y constancia para conseguir lo que uno quiere y NUNCA rendirse. Porque si uno no arriesga no sabe dónde está su límite, dónde es capaz de llegar, qué es capaz de conseguir. Nuestro miedo al fracaso (por ya haber fracasado antes) no tiene que condicionarnos, tenemos que luchar por lo que queremos, con esfuerzo todo se consigue. No tenemos que esperar la ayuda de nadie, tenemos que conseguirlo por méritos propios para alcanzar así la real felicidad.

Así que… ¡a luchar y a brillar! Magnifica forma de cerrar un viernes, empezar el fin de semana y para aquellos privilegiados,, ¡empezar un largo puente! ¿No créeis? :)

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